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| Medalla de Oro de VP |
Premiar los esfuerzos realizados nunca ha sido el fuerte de VP. Antes de su nacimiento, la distinción del Mejor Diputado y algunas iniciativas privadas mantenían viva la tradición de otorgar galardones a aquellos ciudadanos que destacaban en uno o varios ámbitos de VirtualPOL. Más antiguamente, la concesión del nombre de un ciudadano a una calle en el mapa era un orgullo destinado a permanecer durante meses, aunque la sobrecarga provocó en Hispania una regulación que limitaba la temporalidad de las mismas.
En la actualidad, el Gobierno de VP plantea volver a poner el tema sobre el tapete, con pretendida estabilidad, otorgando la medalla de oro de VP a ciudadanos que destaquen excepcionalmente por su servicio a la nación en diversos ámbitos de la vida política, económica, social o cultural. Además, se autolimita el número de Medallas de Oro a dos concesiones por mandato, requiriéndose una mayoría de unanimidad para otorgarla en el Consejo de Gobierno.
El Gobierno de Fernando tiene 4 días antes de las elecciones para otorgar las dos medallas que le corresponden si quiere disponer de dos más en caso de ser reelegido como anuncian las encuestas. De lo contrario, sólo podría otorgar dos en el siguiente mandato.
Pese a la perseguida estabilidad de la Medalla de Oro, la Constitución manda que al ser un premio sea regulado por reglamento, en este caso Decreto. Siendo el Decreto potestad del Presidente, es una herramienta jurídica muy sometida al cambio, salvo algunos que se consideran buenos y permanecen a lo largo de los meses. Sin embargo, persiste la costumbre de revisar todos los Decretos al inicio del mandato, como hacían los pretores urbanos en la antigua República Romana con sus Edictos al presentarse a las elecciones. Sólo el tiempo dirá si la iniciativa gubernamental logra su hueco en la historia o se quedará en el olvido. Depende de que próximos gobiernos recojan el guante y la mantenga en vigor.
